¿Primer gobierno de izquierda en Colombia?
¿Es posible hablar de un primer gobierno de izquierda en Colombia? En el mejor de los casos podemos hablar del primero del siglo XXI. | Imagen: EOM.
Por José Saade Figueroa
La izquierda no es un campo único y armonioso, la componen muchas tradiciones, entramados y representaciones con nacimiento, desarrollo y en casos muerte histórica.
¿Podemos afirmar que el de Petro y Márquez sea el primer gobierno de izquierda en Colombia?
“La izquierda nunca había gobernado Colombia, con Petro y Francia se abre un nuevo episodio en la historia del país”.
El anterior es un lugar común repetido dentro y fuera de Colombia, pero por más que se repita no deja de ser falso.
El de Petro y Francia no es el primer gobierno de izquierda en Colombia.
En primer termino, la razón está dada en la definición misma de la izquierda, la cual, para ser precisos, es mejor referirse en plural.
La izquierda no es un campo único y armonioso, la componen muchas tradiciones, entramados y representaciones con nacimiento, desarrollo y en casos muerte histórica.
Es decir, no existe una sola izquierda, si no que existen y han existido izquierdas.
Definición de izquierda
En los términos de Norberto Bobbio, hablar de izquierdas es referirse a toda una historia de lo que en un momento dado se ha concebido como tal, siempre teniendo estas un énfasis en la igualdad más que en la libertad.
Roberto Gargarella, sitúa dichas tradiciones en cuanto a su relación con el Estado y los derechos, caracterizándose por su desarrollo de las libertades positivas y el rol del Estado en su garantía.
En similar sentido Gustavo Bueno definió distintas generaciones de izquierdas en su texto El mito de la izquierda.
Bueno, al igual que Bobbio erige elementos comunes para definir las izquierdas, en su filosofía las izquierdas son todos aquellos proyectos universalistas guiados por algún tipo de racionalidad que buscan una restructuración en los estamentos sociales.
Al tenor de lo dicho, las izquierdas se dividen en dos grandes grupos. Las definidas y las indefinidas.
Son y han sido parte de las primeras todas aquellas que han tenido un proyecto sobre el Estado, la sociedad y los estamentos sociales.
Estas son las izquierdas que nacieron y se desarrollaron en el siglo XIX y gran parte del Siglo XX.
Estas tradiciones son: La izquierda jacobina, la izquierda liberal, la izquierda anarquista/libertaria, la izquierda social demócrata, la izquierda comunista y la izquierda maoísta.
Existe también una izquierda troskista, pero es muy dispersa en lo organizativo y se encuentra sobre todo en las universidades, políticamente tiene influencia en méxico y argentina, pero no ha sido la norma en los movimientos formalmente definidos y que han logrado representación política.
En el segundo grupo se encuentra la izquierda hegemónica en nuestros días.
Una izquierda construida como detritus de los proyectos definidos fracasados y que, a diferencia de las anteriores, no tiene un proyecto claro de Estado, sus banderas son más abstractas.
Es también en su mayoría la izquierda de latinoamérica con fuertes contenidos indigenistas y tienen mayor cabida las reivindicaciones no puramente económicas.
Hacen parte de esta tradición las ONGs de derechos humanos, movimientos ambientalistas y algunos feminismos, en general reacciones al neoliberalismo con grandes dosis de pragmatismo.
La izquierda indefinida nace en los debates posmodernos de la segunda mitad del siglo XX y toma realmente impulso con la caída de la Unión Soviética, el desmonte de los Estados de Bienestar y el auge del neoliberalismo.
Los gobiernos de izquierda en Colombia
En línea con lo enunciado, en Colombia tuvimos gobiernos de izquierda en el siglo XIX. El partido liberal del siglo XIX tenía elementos jacobinos y liberales.
El liberalismo nació siendo de izquierda toda vez que se oponía al origen divino del poder, abogaba por el fin de la estructura social feudal y al poder absoluto le ponía límites.
En siglo XIX y en particular para Colombia lo revolucionario era el desarrollo del capitalismo, empresa por la que pugnaron los liberales, unos más coherentes que otros, pero en esencia se guiaron hacia ese propósito.
Dicho esto, se puede decir que fueron gobiernos de izquierda liberal en el siglo XIX: Tomas Cipriano de Mosquera, Jose María Melo, José Hilario López entre otros.
Debe hacerse una mención especial a Juan José Nieto, quien hizo parte de la tradición mencionada, pero además ha sido el único presidente afrodescendiente del país.
Los gobiernos del siglo XX
Existen debates sobre algunos gobiernos del siglo XX. El más interesante, que el actual presidente constantemente invoca, es el gobierno de Alfonso López Pumarejo, principalmente su primer gobierno (1934-1938).
Pumarejo es presentado por no pocos en Colombia como el gran reformista, un ejemplo de izquierda socialdemócrata cuyas tareas quedaron inconclusas, cerradas por el régimen político.
No debería ser considerado de izquierdas sino más bien de una derecha social que aceptó reformas para mantener el status quo.
Un Bismark a la criolla, pero sobre todo un banquero que bien administró los negocios familiares con los Estados Unidos.
Lo mismo se puede sostener de los gobiernos liberales de Lleras Camargo, pero ya que en esos no hubo participación de sindicatos ni recibieron apoyo expreso del Partido Comunista, no se les rotula como gobiernos de izquierda.
La cuestión con los gobiernos de López parte de dos elementos: primero el partido liberal colombiano del siglo XX ya no era un partido de izquierda liberal sino de derecha liberal.
La diferencia es que ya no buscaba la alteración de los estamentos sociales ni un modelo de Estado diferente, sino la continuidad del orden establecido.
Lo segundo es que este partido ya no tenía en el capitalismo una herramienta revolucionaria, es más, el capitalismo mundial se transformó en un sistema con mayor prelación de la banca y los monopolios.
En el decir de Lenin esa etapa del capitalismo es su fase superior y terminal también, es el momento en que el capitalismo debe ser reemplazado como sistema.
El capitalismo dependiente, el capitalismo incompleto es la norma de los llamados países periféricos, categoría que muy bien explicaron los pensadores latinoamericanos adscritos a la teoría de la dependencia.
Colombia no desarrolló plenamente su capitalismo y entró al siglo XX en desventaja.
En el momento del gobierno Pumarejo y los liberales que le siguieron sobre todo se aplicó una política de contención a las izquierdas ya definidas, sobre todo a la comunista.
Contención que fue tan eficaz que terminó en la cooptación de sindicatos y hasta del más grande de los partidos comunistas del país para ese momento.
Contrario a lo que muchos afirman en la primera mitad del siglo XX, Colombia no tuvo un gobierno de izquierdas.
No se elaboró una visión propia de la socialdemocracia, aun cuando dicha corriente igual fungió de contención del comunismo en la guerra fría, lo de Colombia fue más dado por la relación de alineamiento con los Estados Unidos.
Asunto que no es menor en la construcción del sentido común de la izquierda colombiana y latinoamericana, la cual es antiimperialista y antinorteamericana.
Terminando el siglo XX y en parte como respuesta al proceso de apertura económica, gobernó Colombia nuevamente el partido liberal, esta vez en cabeza de Ernesto Samper.
Samper es bien conocido en la región como una figura progresista y por tanto de izquierdas, quizás los mejores elementos de su gobierno están hoy en el gobierno de Petro y Márquez.
El origen en partido tradicional y la experiencia de Samper hacen que se dude en que su gobierno hubiera sido de izquierdas.
Más bien fue un gobierno de un neoliberalismo con tonos más sociales para controlar y apaciguar revueltas.
Claro es que proyectó una imagen menos alineada con Estados Unidos, un presidente sin visa. El gobierno de Samper fue una cara ortodoxa en economía, liberal más no libertaria.
El primer gobierno de izquierda del Siglo XXI
Muy a pesar de las confusiones de unos y la estrategia electoral de otros, el segundo gobierno de Juan Manuel Santos no fue ni siquiera una expresión desteñida de la última generación socialdemócrata.
Este fue un gobierno liberal, de derecha liberal.
En tal gobierno participaron “izquierdistas” de la denominada ala samperista, es decir un estilo de progresismo de contención de las secuelas del neoliberalismo.
En síntesis, el de Petro y Francia no es el primer gobierno de izquierdas de Colombia, a lo mucho es el primero en el siglo XXI y es parte de la izquierda hegemónica de este siglo, la izquierda indefinida.
El lugar común se gesta a partir de otros significantes mal asociados a las izquierdas y en particular a la colombiana.
Es muy posible que el rótulo de izquierdas del actual gobierno sea pronto interpelado, ya incluso existen sectores en las izquierdas para los cuales es un gobierno igual de neoliberal que sus antecesores.
En aras de precisar, es difícil afirmar que el gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez sea el primero en la historia de Colombia en identificarse como de izquierdas.
Tampoco es el primero en llegar con apoyos de este espectro político, más bien vale simplemente decir que hace parte de una tendencia global.
Un tipo de política distinta al neoliberalismo es un gobierno que responde al interés de cambio del país y a ese mandato le deberá su éxito. ¿Lo refrenda o lo traiciona?
El actual gobierno sí ha juntado a todos los sectores que alguna vez se rotularon como izquierda en el país y puede decirse que en su seno alberga tradiciones en verdad de izquierdas.
Los más influyentes son los sectores socialdemócratas y las corrientes propiamente indefinidas, por último, en forma muy reducida elementos de la izquierda comunista.
Otra forma de leer al gobierno es desde la óptica de la lucha de clases.
En ese marco de enunciación, el gobierno se debate en dos mundos:
El primero la construcción de un pacto de clases con miras a allanar el camino para reformas profundas y desde allí cerrar el paso a visiones conservadoras y hasta fascistas.
El segundo mundo, es el de la conciliación de intereses de clase, donde la transformación se diluye en una nueva forma de mantener el dominio de clase, dada las relaciones de fuerza dentro y fuera de la coalición gobernante.
En conclusión, es un lugar común y un mito plantear al gobierno actual de Colombia cómo el primero de izquierdas del país. En el mejor de los casos es el primero del siglo XXI.